El pasado 2 de junio de 2021 se aprobó el Real Decreto 390/2021, de 1 de junio, por el que se aprueba el procedimiento básico para la certificación de la eficiencia energética de los edificios. Una de las novedades que aporta y que va a repercutir directamente en las comunidades de vecinos se encuentra en la página 7, artículo 3.1 secció f del BOE.
En dicho apartado se indica que, apartir de ahora, todo edificio que esté obligado a realizar la Inpección Técnica de la Edificiación (ITE), también está obligado a realizar la certificación energética del propio edificio. La finalidad de esta medida es la promoción de la eficiencia energética en los edificios, así como, que la energía que estos utilicen sea cubierta mayoritariamente por energía procedente de fuentes renovables, con la consiguiente reducción de las emisiones de CO2 en el sector de la edificación.
La certificación de eficiencia energètica de un edificio, a efectos prácticos, se requiere a la hora de pedir subvenciones de cualquier tipo por la comunidad, y además, equivale a tener el certificado de cada vivienda que es necesario para la compra o alquileres de los inmuebles. El certificado también incorpora un informe donde se aconsejan diferentes medidas para mejorar la eficiencia energética del edificio.
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