Piscinas en cubiertas

Como cada año por estas fechas, nos están empezando a llegar los correos de consulta estrella, preguntando de cuántos litros podría ser la piscina que los gustaría ponerse en una terraza, normalmente de las desmontables, como si fuera algo sin demasiada importancia y que “hace todo el mundo”.

La respuesta inmediata es siempre la misma:

A priori, ni idea. Así que lo mejor es que no pongáis ninguna piscina.

Y es que hay demasiados factores para poder decir un número al alza, pero además, el importante realmente no es la capacidad en litros, sino la superficie y altura de esta, puesto que no es el mismo 2000 l repartidos en 20 m² que en 6 m².

La mayoría de las consultas nos llegan sobre edificios que no hemos construido nosotros, y además, que tienen más de 40 años de antigüedad. En aquella época no existía el Código Técnico de la Edificación y la normativa que regía el peso que tenía que aguantar una cubierta era mucho más permisiva, y esto sin tener en cuenta posibles patologías ocultas del la estructura. Para poder hacer un cálculo habría que hacer un estudio realizando catas de la estructura en todas las plantas del edificio hasta la fundamentación, para comprobar el sistema constructivo de esta y el estado en el cual se encuentra.

Hoy en día lo CTE nos obliga, por suerte o por desgracia, a sobredimensionar las estructuras para evitar posibles accidentes derivados de patologías, meteorología inesperada, etc. por el que en un edificio contemporáneo (posterior al 2006), se puede instalar una piscina con muy menor riesgo de colapso, con una carga repartida de hasta los 200 Kg/m² aproximadamente. Y aunque no es nada recomendable, si se hace, es mejor colocar estas piscinas cerca de los puntos donde la estructura se apoye sobre los pilares y siempre repartiendo la carga el máximo posible.

Piscina improvisada en balcó
Imagen que se hizo viral en las redes con una piscina improvisada a un balcón. Esperamos que nadie saliera herido…